domingo, 6 de noviembre de 2011

DIOS ME LIBRE DE DAR MANOS A MANOS


(Soneto con estrambote, dúplica al soneto sin título de Anonymus)

Dios me libre de dar manos a manos
y de ofrecer ayuda al caminante,
pues estos tiempos son duda constante
y hasta zozobra para  todo humano.

El mérito estará en saber si damos
esquinazo al dolor y, esto no obstante,
notamos que las huellas  son constantes
recuerdos de otros días ya lejanos.

En tanto que ese día  busca celda
en el cuadrante gris del calendario,
y en tanto que el sillón dicte sus normas

de posar en sus muelles las caderas,
dale descanso al cuerpo en solitario
y embaúla, cual Sancho, a todas horas.
Que vida pastoril solo requiere
comer, dormir sin fin y soltar vientre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Huelgo de entrar a contestar sonetos
y menos si se añaden ditirambos;
mejor será parlamentar entrambos
y ver si entre los dos ponemos veto.

No quiera usted ponerme en más aprieto,
(sería así como bailar el mambo
hoy en día, en que ando patizambo)
Que ya es mucho, si me salen dos cuartetos.

No es mala de vivir, cual recomienda,
La vida pastoril, si en comer vienes.
Lo de dormir sin fin ya es otra cosa,

Pues debo de decir, para que entienda,
Que si al cuerpo a dormir sin fin le tienes
Dedicarás muy poco a la ..dienda.

Que sea la vida así: ..der primero;
Comer, lo segundo; dormir, tercero.


Antonio Merino